noviembre 27, 2018 0 Comentarios
Dedicaré esta entrada a octubre rosa; sí, prefiero llamarle así que nombrar de golpe a la enfermedad que, desde 2006, es la primera causa de muerte en México entre la población femenina a partir de los 25 años, el Cáncer de mama.
El 19 de octubre se reconoce como el Día Internacional de la lucha contra el Cáncer de Mama, y aunque las estadísticas son tajantes -cada dos horas una mujer mexicana muere a causa de esta enfermedad-, me parece esperanzador que exista una fecha en la que este padecimiento tenga aún más visibilidad para la orientación y asesoramiento de las mujeres (y el conocimiento de todos) desde la óptica de la prevención.
El Cáncer de mama es un problema de salud pública en aumento. Eso es una realidad que -desafortunadamente- no podemos cambiar; pero lo que sí podemos hacer es contribuir para tejer una sociedad más informada que priorice la cultura de la prevención antes que los mitos, la desinformación y el morbo alrededor de quienes padecen esta enfermedad. El objetivo de las siguientes líneas es justamente ese: Entregarte información a ti que me estás leyendo para ayudarte a explorar tu cuerpo, y con ello, cuidar tu vida.
Hola, prevención
Leemos, escuchamos a otros, lo vemos en redes sociales, como parte de programas de salud y testimonios: El primer paso para la lucha contra el Cáncer de mama es la prevención. Son tres las acciones clave para la detección temprana:
Llevar a cabo cada una cambia totalmente el pronóstico de la enfermedad. Haz del tiempo tu aliado, pues entre la prevención y la detección está tu vida de por medio. El gesto de amor más grande que puedes hacer por tu cuerpo es cuidarlo. Y cuidarlo es conocerlo. Aquí va la primera acción, la autoexploración:
¿Qué estamos buscando?
– Un bulto del tamaño de un guisante o una avellana (no tiene que ser doloroso). Una masa dura y densa, inmóvil al palparlo.
– Anomalías asimétricas. Generalmente sólo aparecen en uno de los senos.
– Pezón retraído (en una posición invertida a la normal).
– Cambios en el color de la areola (la piel de tonalidad oscura que rodea al pezón).
– Alteraciones en la textura de la piel de la mama (piel de naranja, rojeces, grietas).
– Incremento del número de venas visibles en uno de los senos.
– Asimetrías en el tamaño de las mamas.
La manera más recomendable es realizar la autoexploración frente a un espejo:
Comienza identificando algún cambio en el color y/o textura de cada seno. Luego, sigue con el tacto para hallar alguna anomalía de las antes mencionadas.
La segunda acción son las revisiones periódicas:
Después de los 25 años lo mejor es que un especialista explore tus senos anualmente. No quiere decir que dejes de lado “o te saltes” la exploración mensual, pero sí es necesario que alguien capacitado descarte cualquier riesgo. No está de más y te sentirás más tranquila con la valoración de un experto.
La tercera acción es la mamografía:
Lo que se busca con estas pruebas son quistes, microcalcificaciones o distorsiones del tejido mamario para consolidar un diganóstico.
Lo anterior es un repaso de las acciones que las mujeres debemos convertir en rutina para la prevención del Cáncer de mama. Existen cientos de sitios y fuentes para conocer más a fondo las posibles causas y mitos que rodean a este padecimiento. No busco entrar en detalles al respecto; quiero que este espacio sea un listón de solidaridad y apoyo para con las mujeres que enfrentan esta batalla. Y del otro lado, las que somos parte de la resistencia, hacer un llamado a la sociedad y a cada vez más mujeres a poner su hombro, corazón y mente; a ser voz de la responsabilidad que tenemos cada una con nuestro cuerpo y con las demás: Ayudarlas, orientarlas y ejercer juntas nuestro derecho a la información. Nos nombro la resistencia porque debemos oponernos a aceptar -con resignación- un diagnóstico desfavorable. Siempre hay algo qué hacer si el Cáncer se detecta a tiempo; debemos oponernos a no recibir atención médica de calidad y orientación para sobrellevar la enfermedad, pero sobre todo, debemos oponernos a la muerte como la puerta de salida a este problema.
El Cáncer no es sinónimo de muerte, es la lucha de una en la que todas debemos participar.
diciembre 05, 2024 0 Comentarios
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